No se pretende que la información que le ofrecemos en este apartado sustituya en modo alguno a los consejos que pueda proporcionar un médico u otro profesional sanitario especialista. Por todo ello, se aconseja seguir las instrucciones del cirujano en el momento del alta y durante las visitas médicas y consultar a un profesional experto para obtener la información que necesite o más le convenga. Para más detalles ir a AVISO LEGAL Y POLÍTICA DE PRIVACIDAD.
La edad ideal para ser intervenido de Pectus Excavatum es la fase prepuberal, entre los 12-14 años (adolescentes antes del crecimiento), para evitar las posibles complicaciones derivadas de la propia enfermedad y los problemas psicológicos que puedan aparecer. Dicho esto, gracias a la facilidad de la técnica Pectus Up, los pacientes adultos también pueden beneficiarse del tratamiento quirúrgico con esta nueva técnica.
No existe una edad límite, aunque el tratamiento debería realizarse lo antes posible, para evitar las posibles complicaciones derivadas de la propia enfermedad y los posibles problemas psicológicos.
Gracias a la facilidad de la técnica, los pacientes adultos también pueden beneficiarse del tratamiento quirúrgico. Se ha intervenido a pacientes con buenos resultados hasta los 46 años de edad, aunque estos casos son excepcionales.
La indicación quirúrgica siempre dependerá del tipo y grado del Pectus Excavatum y de la morfología del paciente, y no tanto de la edad del paciente.
Hay una predisposición genética a sufrir estas anomalías. Se observa una ocurrencia familiar de Pectus Excavatum en aproximadamente el 35-45% de los casos.
Siempre es recomendable practicar ejercicio para que el paciente adopte una postura correcta y mejore su condición física. En personas afectadas de Pectus Excavatum es aconsejable realizar estiramientos y ejercicios respiratorios para aumentar la capacidad pulmonar. Es aconsejable practicar la natación ya que facilita este aspecto y también refuerza la musculatura.
La realización de ejercicios gimnásticos servirá como complemento para proporcionar mejoras en términos de respiración, fuerza y resistencia, sin que se produzca una corrección de la malformación, aunque sí una mejora de la parte muscular y física en general. Los ejercicios para muscular la zona del tronco superior se pueden realizar y pueden mejorar el aspecto, estéticamente, aunque se debe ser precavido ya que, en ocasiones, el resultado puede resultar el contrario, que el hundimiento se perciba aún más. Aconsejamos pedir consejo a los especialistas en esta materia.
La mejor opción de mejora es, sin duda, hacer estiramientos. La práctica de estiramientos permite estirar el pecho para que el cartílago adjunto al esternón y las costillas adyacentes se adapten para condicionar una postura erguida.
Por lo tanto, los estiramientos serán clave a la hora de corregir, en cierto modo, la apariencia del Pectus Excavatum. No se debe olvidar que los ejercicios de calentamiento serán esenciales para la buena adaptación y evitar sobreestirar de forma anómala diferentes partes del cuerpo.
La indicación de pasar por un tratamiento quirúrgico con Pectus Up estará basada en el diagnóstico clínico de Pectus Excavatum, siempre que cumpla con los requisitos descritos en el capítulo de tratamiento de Pectus Excavatum de esta página web. Sin embargo, la decisión dependerá siempre del criterio del cirujano y de la aceptación del propio paciente.
La indicación del tratamiento quirúrgico del Pectus Excavatum, en general, vendrá condicionada por los criterios físicos o psicológicos que justifiquen la intervención.En el caso de tratamiento con el nuevo implante Pectus Up, tanto los casos leves como los severos pueden ser corregidos con un alto porcentaje de éxito, aunque siempre dependerá de cada paciente en particular. En casos muy concretos y complejos, la técnica Pectus Up se puede complementar con otros procedimientos quirúrgicos.
Hasta finales de diciembre de 2019, se han realizado más de 130 intervenciones a pacientes con Pectus Excavatum de distintas edades y grados de severidad. Entre los pacientes operados algunos han querido compartir su experiencia en formato de testimonio, que podrán encontrar en la sección Testimonios del apartado de Pacientes de esta página web.
Las intervenciones se han practicado en países como España, Francia, Portugal, Irlanda, Colombia, México y Chile. El primer caso se realizó en 2012, y ya se han retirado 15 implantes con buenos resultados. Su publicación está en proceso de redacción por parte de los centros especializados.
No, la técnica del Pectus Up es mínimamente invasiva que implica una reparación quirúrgica del Pectus Excavatum, de forma extratorácica y sin alto riesgo. Al utilizarse anestesia general, no podemos descartar que el paciente pueda sufrir alguna complicación como en cualquier otro procedimiento quirúrgico en las mismas condiciones.
Sí, al paciente se le aplicará anestesia general en un quirófano convencional. No se descarta que a medio plazo la intervención se pueda realizar a través de un proceso de Cirugía Mayor Ambulatoria.
Los pacientes suelen permanecer en el hospital entre 1 y 4 días (promedio de 2) después de la reparación quirúrgica, dependiendo de la edad y del grado del Pectus Excavatum.
El tamaño dependerá de la medida del tórax y del grado del Pectus Excavatum, siempre en función de cada paciente en concreto.
El tamaño habitual de la cicatriz es de unos 2-3 cm de anchura.
Se debe ser cuidadoso con la higiene personal para evitar posibles infecciones. No se podrá tocar ni mojar la herida. Además, no podrá levantarse el apósito hasta la primera revisión con el cirujano. Se recomienda practicar ejercicios de respiración profunda dos veces al día.
No es aconsejable estar largo tiempo en posición de decúbito (tumbado).
Es conveniente dormir boca arriba y evitar estar de lado durante el sueño (al menos durante los primeros 3 meses).
No deben adoptarse posturas anómalas o rígidas que a priori puedan evitar el dolor, ya que pueden ser causa de otras alteraciones posteriores.
Se debe mantener una buena posición del tronco y evitar exponerse a situaciones de riesgo.
No hay que hacer rotaciones bruscas del torso, ni levantar pesos o llevar mochilas durante, al menos, un mes.
Evitar los ambientes con multitud de personas y los contactos físicos violentos.
El periodo de reposo es de alrededor de una semana tras la intervención. Se recomienda un reposo relativo de una duración aproximada de 15 días.
Este consistirá en realizar las actividades de la vida diaria, mantener una buena postura, abstenerse de realizar actividades deportivas y no exponerse a situaciones de riesgo.
El paciente podrá acudir a clase o a su trabajo habitual, respetando siempre las recomendaciones del cirujano.
Reposo relativo, tratando de evitar los movimientos que causen dolor, y reanudar las actividades de la vida diaria de forma progresiva.
Realizar ejercicios suaves de respiración de forma diaria como, por ejemplo, inspirar suavemente hasta conseguir llenar totalmente el pecho; después, espirar lentamente hasta dejar el pulmón sin aire.
Puede mover y levantar los brazos de forma gradual, aclimatándose a la nueva situación de forma sucesiva y continua, sin que cause dolor.
Dependiendo siempre de la evolución de cada paciente, teniendo en cuenta que la recuperación es tanto más rápida cuanto más joven es la persona.
Se puede ir a la escuela, universidad o a al trabajo habitual a partir de la primera revisión con el cirujano, si este lo considera y el paciente se siente bien.
Inicio de la actividad deportiva entre tres y seis meses después de la intervención.
Abstenerse de realizar deportes de alto riesgo o que impliquen movimiento del torso como golf, tenis, etc., durante un período de un año.
Los dispositivos de fijación metálica o implante torácico en general no son capaces de soportar los niveles de actividad ni las cargas que tolera una pared torácica normal y sana.
En el caso de no seguir las instrucciones recomendadas por el cirujano, el Pectus Up puede aflojarse o desplazarse si es sometido a soportar pesos o cargas o a actividades muy intensas.
Incumplir las instrucciones postoperatorias podría dar lugar a complicaciones. Ver el apartado de complicaciones.
La expresión “vida normal o cotidiana” es relativa. La referencia sería una persona que realiza actividades familiares, laborales o académicas y con un nivel de actividad física medio-bajo (sin actividades que comporten un riesgo elevado).
Después de la reparación quirúrgica del Pectus Excavatum con el método Pectus Up, el paciente debe permanecer en reposo alrededor de una semana después de la intervención quirúrgica, y se recomienda reposo relativo de una duración aproximada de 15 días.
Podrá realizar cualquier actividad deportiva, siempre y cuando evite los deportes de alto riesgo o deportes especiales como el golf, la natación (estilo espalda) o el tenis durante un período de seis meses, ya que implican un movimiento amplio del torso. Siempre dependerá del consentimiento del cirujano.
Después de la intervención deben reanudarse las actividades de la vida diaria de forma progresiva, evitando los movimientos que causen dolor.
Se puede retomar la actividad deportiva en la escuela a partir de un mes de la intervención, siempre y cuando el cirujano lo considere conveniente y el paciente se sienta bien.
Se debe evitar hacer rotaciones del torso y levantar pesos durante el primer mes.
Evitar los contactos físicos violentos.
Inicio de la actividad deportiva intensa a partir de los seis meses de la intervención.
Abstenerse de realizar deportes que impliquen movimiento del torso, por ejemplo, tenis, etc., durante un período de un año.
Si la herida sufre algún cambio, como supuración, hinchazón y/o obertura de una parte, se debe consultar con el hospital.
Es necesario seguir las instrucciones de la terapia analgésica prescrita después del alta médica. En caso de experimentar dolor, se puede tomar los analgésicos recomendados por el cirujano, y si el dolor persistire, el paciente deberá ponerse en contacto con él.
En caso que reaparezca algún dolor una vez transcurridos varios días del periodo postoperatorio, se puede tomar de nuevo los analgésicos recomendados por el cirujano, pero en caso de persistir o incrementarse este dolor, el paciente deberá consultarlo con él.
Analgesia pautada mediante ibuprofeno o paracetamol, mayoritariamente.
Dormir boca arriba y evitar estar de lado durante el sueño (al menos durante los primeros 3 meses).
Puede viajar por vacaciones, siempre y cuando mantenga una buena posición del tronco y evite exponerse a situaciones de riesgo.
No levantar ni sostener maletas, ni levantar pesos, durante al menos, un mes.
Evitar los ambientes con multitud de personas.
El dispositivo puede dar positivo en el detector de metales. Es aconsejable llevar consigo un documento de su cirujano que indique la presencia del implante metálico en el tórax.
Inicialmente permanece implantado durante unos 3-4 años, pero en algún caso puede estar más tiempo e incluso permanentemente. Siempre dependerá de la edad y especialmente de la evolución de cada paciente en concreto, y siempre a criterio del cirujano.
No, se hace de una forma ambulatoria, sin precisar hospitalización, aunque los pacientes pediátricos suelen pasar una noche ingresados.
Se pueden realizar una TC aunque la imagen del tórax puede quedar algo distorsionada (artefactos). NO SE PUEDEN REALIZAR RESONANCIAS MAGNÉTICAS.
En pacientes muy, muy delgados, a veces se podría notar la placa bajo la piel en la zona central. Si el cirujano contempla esta posibilidad, se puede hacer una pequeña modificación en la técnica en el momento final de la intervención. En el resto no es posible la visualización ya que se implanta de forma subpectoral.